Manual de instrucciones para una pandemia: Instrucciones previas para una utopía de Annie Pui Ling Lok y Juan Ayala

Julio Vélez Sainz*

De toda la rica gama de ofertas culturales que nos trajeron las pantallas y sus juegos de supervivencia, intermedialidad y la temática de lo privado y lo público destaca Instrucciones previas para una utopía de Annie Pui Ling Lok y Juan Ayala como uno de sus textos más poderosos. En ella se presenta la pandemia no como catástrofe (que lo fue) sino como oportunidad (que lo pudo haber sido). En este artículo se analiza cómo los autores abogan por un presente radical a partir de un pensamiento utópico enraizado en corrientes ideológicas de izquierda que permiten superar la gran narrativa posmoderna de la inacción para completar un ciclo natural en el que el individuo se hace con las calles ya en plena libertad.

EN AQUELLOS DÍAS DE AISLAMIENTO y furia que siguieron al desarrollo de las SARS COVID-19 en todo el mundo, el hecho teatral se vio enriquecido por una serie de propuestas que respondían a la nueva lógica social del confinamiento masivo. Ya veía en un trabajo anterior como se entrevieron tres paradigmas fundamentales: supervivencia, intermedialidad y la temática de lo privado y lo público (Vélez-Sainz, 2021).

El paradigma de la supervivencia responde a la necesidad económica de la mayoría de los grupos, sobre todos los ámbitos privados, de sobrevivir a esta nueva crisis que se avecina. Se trata, pues, de un paradigma de carácter económico. La intermedialidad corresponde a aquellos grupos y compañías que han aprovechado los medios digitales contemporáneos para complementar el hecho teatral, fundamentado en el convivio, con herramientas propias del mundo digital. Se trata, pues, de un paradigma de carácter técnico. El último paradigma responde propiamente a una necesidad estética. Un número importante de producciones han jugado con el hecho de estarse infiltrando, como si de un virus se tratara, dentro de las casas de los espectadores que, a su vez, recordemos que estaban aisladas. Se establecía así un juego creativo entre el espacio de lo público y de lo privado. El último de los paradigmas, que merece estudio aparte, es el del desarrollo de unas obras que proponían unos marcos conceptuales e ideológicos muy cercanos a lo revolucionario.

De estas, la obra conceptualmente más poderosa es probablemente Instrucciones previas para una utopía de Annie Pui Ling Lok y Juan Ayala, con texto de Juan Ayala, interpretación de Jesús Barranco, Juan Ayala y Paula Rodríguez, sonido de Federico Sancho y Juan Ayala e imagen de Federico Sancho. Se trata de una obra diseñada íntegramente durante la pandemia. El programa de mano referencia los primeros y muy complejos días de finales de marzo:

La catástrofe se ha impuesto y el parón nos ha cogido con inercia. La inercia de seguir haciendo lo que sabemos en un escenario incierto. Mientras los equipos sanitarios hacen lo imposible para contener una ola de realidad inesperada, el resto nos hemos quedado esperando.

Este espectáculo ha nacido mientras esperamos. Mientras esperamos a que se vuelvan a abrir las casas, la calles, las plazas. A que se vuelvan a abrir los teatros. A que podamos volver a intentar ganarnos la vida. A que se diluya la incertidumbre de no saber lo que quedará en pie. Mientras esperamos a poder estar en el mismo lugar con gente, junta. A volver a tocarnos.

En una entrevista realizada a Juan Ayala desde Londres, indica que vive en una realidad en la que se mantiene una línea de continuidad constante con aquellos terribles meses de la pandemia en la que Europa toda, después de Asia y antes de América, se confinó completamente. Confiesa Juan que no ha salido del todo de esa sensación de irrealidad en la que estábamos todos inmersos. Quizá sea desde esa misma sensación, desde la que pudo construir una pieza tan disruptiva como la presente. Ayala trata indistintamente su pieza como “texto dramático”, “ficción sonora” que procura establecer una sensación de convivio con el espectador.  El telos de la obra destaca la repetición del apocalipsis:

Nada es más viejo que el fin del mundo. La pasión apocalíptica siempre se ha utilizado como una forma de coerción, desde la religión o como método de gobierno. La meta de la profecía no fue nunca tener razón sobre el futuro, sino operar sobre el presente.

Enfrente de esa estrategia y con el deseo de accionar sobre el presente a su vez, nace este espectáculo. Entendiendo lo presente en sus dos vertientes; la temporal, imaginando posibles futuros para actuar sobre Hoy, pero también y quizás más urgente, el estar presente, la presencia física como hecho indispensable para la vida en común. Es un intento de trascender la imposición bidimensional de la vida en confinamiento, de encontrarnos en un lugar con tres dimensiones. Es un intento imposible de volver a juntarse, de recordar un encuentro físico, carnal quizás.

Se trata de un efecto de “presentismo radical” en los dos sentidos de “presencia” y “presente” en el que se combinan la ucronía y la dinámica entre la presencialidad y la ausencialidad que se mezclan indeleblemente. Para Ayala, “el teatro sucede en la imaginación y no en la pantalla”, de ahí que haya construido lo que denomina una “pieza mental” similar, aquellas que se hacían los oradores para la construcción de un discurso por medio del arte de la memoria de modo que se produce una confusión entre el espacio teatral y el escénico

INSTRUCCIONES EVITA CENTRARSE en el mundo de la pantalla. No obstante procura de una manera muy firme infiltrarse en la intimidad del público. Para ello parte de una decidida apuesta por la atmosfera sonora que funciona a partir de algo parecido al método Coué. Émile Coué (1857- 1926) fue un psicólogo y farmacólogo francés, que se centra en una repetición rutinaria de una expresión particular de acuerdo con un ritual específico, en un estado físico dado, y en la ausencia de cualquier tipo de imagen mental aliada, al principio y al final de cada día.

Se trata de un espectáculo en el que el intérprete y el espectador son la misma persona. El intérprete/espectador necesita un espejo, una puerta, una ventana, un papel y algo para escribir. El efecto hipnótico se refuerza por medio de la repetición del mismo movimiento, que se produce hasta tres veces. Técnicamente es una obra que se fundamenta en una coreografía muy marcada que depende de la triple repetición de una secuencia de espejos y puertas en unos ecos de nuevo borgianos. Para ello se parte de un sonido binaural diseñado para realizar un efecto tridimensional que permite la inmersión en la narración. Esta, de carácter hipnótico, dispone una descripción distópica de la realidad en la que las plataformas han tomado la calle: las tarjetas son contactless, los desplazamientos permitidos son los del comercio de Amazon.  Encontramos incluso ecos del fin de la Historia a la Fukuyama, una suerte de “There is no alternative” o TINA– (en español : « No hay alternativa o No hay elección »). Este un eslogan político corrientemente atribuido a Margaret Thatcher que presenta que el mercado, el capitalismo, y la mundialización, son fenómenos necesarios y beneficiosos, y que cualquier otra orientación está destinada al fracaso de modo que caracteriza muy bien el orden mundial actual. Les nouveaux maîtres du monde et ceux qui leur résistent de Jean Ziegler señala concepto emblemático, como el tercer poder totalitario más importante, después del bolchevismo y el nazismo (2002).Para Ayala la percepción, la fantasía y el cuerpo nos fue arrebatado, no se podía ir a comprar ni a andar, lo que el autor entiende como alienación de tu propio cuerpo: “hay un Amazon que nos quita el cuerpo” y la volición por medio de “herramientas de optimización como Google” que busca “sabotear” con su propuesta. Consecuentemente, al espectador intérprete se le invita a pagar Internet y disfrutar de la obra en la soledad del hogar en lugar de la realidad de la cámara. La obsesión del creador es la de “romper la pantalla” y de “huir de las pantallas”, es decir, ir más allá de los límites perceptivos que imponen las pantallas en esta especie de panópticon foucaultiano en el que nos tocó vivir durante el confinamiento, confinamiento que para el creador es “eterno”: “La pandemia nos pone en un lugar de irrealidad”. En la narración “ni siquiera una respuesta totalitaria ha logrado encauzar la situación y nadie sale de su casa”. El final, no obstante, está impregnado de un claro sentido utópico, tras la ventana se ve que un grupo de gente, una comunidad remota, “líquida”, que acaba tomando la calle.

AYALA ESCRIBE “EN EL PRESENTE RADICAL”. Detrás de esta obra se encuentran las reflexiones de Amador Fernández-Savater, sobre el libro Ahora del Comité Invisible sobre la atención que se pierde en el maremágnum de interconectividades, según esta noción

No. No vivimos excesivamente instalados en el presente. Es un error del pensamiento crítico contemporáneo, un desfase entre la teoría y la experiencia cotidiana. Nuestro problema más bien es el contrario: la incapacidad generalizada para estar aquí y ahora, la erosión de la atención. No vivimos encerrados en ningún presente perpetuo, sino en un tiempo contraído entre los pendientes y los posibles.Se trata, claro, de una narración en términos de utopía, caos, crisis y provocación que busca construir y dibujar posibles. Es, por lo tanto, una obra de modernidad y no de post-modernidad fragmentaria. Para Ayala, nuestras relaciones no son mercantiles, sino un fin de la felicidad de modo que este pequeño movimiento de convierte en una alternativa social que, de manera casual, se estrenó el 1 de mayo. Uno de los efectos dramatúrgicos más usados es una sencilla pausa teatral que permite caminar y deambular como haciendo “el muerto en el mar” dejándose llevar a la deriva, “al pairo” “a la ventura”, con tranquilidad. Frente al fear of missing out (ese terrible FOMO de interesante dramaturgia propia) por el que siempre hay algo más interesante que lo que estamos haciendo, un lugar, tu lugar, tu casa, se convierte en una utopía y un momento, tu momento, en una ucronía, en un “presentismo radical”.

Bibliografia

Ayala, Juan y Annie Pui Ling Lok, Programa de mano de Instrucciones previas para una utopía, Madrid, Teatro de La Abadía, 2020a.

Ayala, Juan y Annie Pui Ling Lok, Instrucciones previas para una utopía, grabación cortesía del Teatro de La Abadía, Madrid, Teatro de La Abadía, 2020b.

Comité Invisible, Ahora, trad. Diego Luis Sanromán, Logroño, Pepitas de Calabaza, 2017.

Fernández-Savater, Amador, “Habitar el presente: una lectura de ‘Ahora’, del Comité Invisible”, El Diario.es, 5 de enero de 2018, URL: enlace, fecha de última consulta: 11/04/2021.

Foucault, Michel, Vigilar y castigar: El nacimiento de la prisión, trad. Aurelio Garzón del Camino, Madrid, Siglo XXI, 2003.

Fukuyama, Francis, The End of History and the Last Man, Nueva York, Free Press, 1992.

Vélez-Sainz, Julio, “El teatro en los tiempos del corona: utopía, convivio, supervivencia e intermedialidad”, Últimos circuitos teatrales del siglo XXI, eds. Jara Martínez y Margarita del Hoyo, Madrid, Antígona, 2021, 421-441.

Ziegler, Jean, Les nouveaux maîtres du monde et ceux qui leur résistent, París, Points, 2002.

* Julio Vélez es catedrático de literatura española en la Universidad Complutense y director del Instituto del Teatro de Madrid

Revista editada en Madrid por Teatrero del ITEM.
Registro Legal: M.17304-1980
ISSN(e): 3020-4062